sábado, 9 de junio de 2012

PIPIRRANA DE JAÉN


De larga tradición en la provincia de Jaén, la pipirrana es un plato típico cuya receta se encuentra a medio camino entre la ensalada y el gazpacho. Hay diferentes maneras de prepararla dependiendo de la zona, aunque todas ellas llevan como base un buen aceite de oliva virgen extra de nuestra tierra, el tomate, el ajo y el pimiento verde. .. Tradicionalmente, se degusta acompañada de pan, para aprovechar bien el caldo que empapa los ingredientes.

Es un plato muy agradecido, barato y delicioso que durante todo el año puede acompañar cualquier cosa en la cena y hará las delicias de los amante del tomate. No obstante, su consumo suele ser más frecuente durante los meses de verano, dado que es la época en la que se producen unos tomates de extraordinaria calidad en nuestra tierra.

El origen de la pipirrana se halla en la localidad de Baeza, aunque tanto la receta como el nombre se han expandido al resto de la provincia, y a localidades cercanas de la comunidad manchega.

En los distintos municipios donde se cocina, la receta ha sufrido diversas modificaciones. Así, en la zona de Cazorla, los ingredientes de la pipirrana se trituran hasta conseguir una masa espesa, similar a la del salmorejo cordobés. En el resto de Jaén, es habitual que, a gusto del consumidor, se le añada atún o huevo duro, o ambas cosas, como es el caso de esta receta de pipirrana que os presento.

Ingredientes:
1 kg de tomates maduros (bien rojos)
1 pimiento verde
2 dientes de ajo
1 lata de atún al natural
2 huevos cocidos
orégano
aceite de oliva virgen extra
agua
sal

Elaboración:
Poner a cocer dos huevos. Dejar unos 10 minutos desde que el agua comienza a hervir. Dejar enfriar, pelar y reservar. Lavar bien los tomates y el pimiento.

En un mortero, se machaca bien medio diente de ajo, un trozo de pimiento verde, unos trocitos de tomate sin piel, la yema de un huevo cocido y un poco de sal. Cuando estén bien machacados todos estos ingredientes formando una pasta, añadimos unas cucharadas de agua y la desleímos (con 4 ó 5 cucharadas será suficiente). Reservar.

En una ensaladera se cortan los tomates en gajos o dados (podemos pelarlos, según gusto). Picamos finamente el ajo que nos queda (un diente y medio), cortamos el pimiento verde en trozos más bien pequeños, y el huevo cocido restante.

A continuación añadimos el majado que tenemos reservado en el mortero, un buen chorreón de aceite de oliva virgen extra y sal. Removemos bien para que se mezclen todos los ingredientes.

Por último, añadimos por encima un poco de orégano y el atún.

Guardamos en el frigorífico al menos un par de hora antes de consumir para que esté bien fresquita.

Un consejo: no olvidar un buen pan para disfrutar de su deliciosa salsa.

Buen provecho.