Este plato está cocinado con una base de huevos y pertenece a los platos de la cocina tradicional. Por regla general se consume, principalmente, durante todo el año, y se suele servir a los comensales como primer plato.
Esta es una receta muy sencilla y ligera, idónea para cenar o hacer una comida suave. También es una buena forma para sorprender a tus invitados con una tortilla diferente.
Ingredientes:
• 2 calabacines
• 2 cebolletas medianas
• 1 diente de ajo
• 6 huevos
• aceite de oliva virgen extra
• perejil
• sal
• pimienta negra molida
Elaboración:
Lavar bien los calabacines, sin pelar, y cortar en cuadraditos pequeños (como de 1 cm).
Picar finamente el ajo, las cebolletas y el perejil.
Calentamos un poco de aceite de oliva en una sartén. Rehogamos la cebolleta y el ajo. Cuando la cebolleta esté transparente echamos el calabacín picado y el perejil. Pochamos el conjunto a fuego lento entre 15 ó 20 minutos hasta que se reblandezca el calabacín.
Sacar los calabacines, escurrir el aceite y reservar.
Batir los huevos y añadirles los calabacines. Salpimentar al gusto y dejar reposar unos minutos.
Echar en la misma sartén en la que se han elaborado los calabacines, la mezcla del huevo.
Darle a la tortilla la forma deseada y hacerla poco a poco por todos lados.
Podemos servir con unos tomates aliñados.
Buen provecho.